Los Standards (I): «Sweet Georgia Brown»

Maceo Pinkard
Ben Bernie and His Hotel Roosevelt Orchestra
Kenneth Casey
Ethel Waters

Los Standards (I): «Sweet Georgia Brown»

Este año, 2025, se cumple el centenario del standard «Sweet Georgia Brown». Según los entendidos en música y en números aseguran que está canción se encuentra entre las diez grabaciones más escuchadas de la historia. Una de las razones que la encumbran a esas privilegiadas posiciones se la debemos al equipo de baloncesto “Harlem Globetrotters”. Estos deportistas empezaron a utilizarla de una manera informal desde 1949, y a partir de 1952 se convirtió en su “signature song”. Ni los señores de los números nos pueden dar la cifra de los millones de personas que la han escuchado (en los EE. UU. y en el resto del planeta) y lo seguirán haciendo mientras llenan las canchas para ver el peculiar partido-espectáculo de los “Harlem Globetrotters” que comienza cuando por los altavoces suena silbada «Sweet Georgia Brown». La versión que eligieron los deportistas la grabó, a principios de 1949, el hoy desconocido grupo «Brother Bones and His Shadows». «Brother Bones» fue el norteamericano Freeman Davis (1902-1974) que silbaba y era percusionista, llevando el ritmo golpeando huesos (bones) que provenían de las costillas del ganado vacuno. «His Shadows» fue su compatriota el teclista Herb Kern (1899-1950) que utilizó el primer sintetizador que se inventó (1938) y que llevaba el nombre de Novachord.

«Sweet Georgia Brown» se escribió en el año 1925 y los créditos nos muestran que fue compuesta por Maceo Pinkard y por el director de banda y violinista Ben Bernie. La letra se la debemos a Kenneth Casy.  Podemos asegurar con total certeza que Bernie no escribió ni una sola nota de la canción, ya que por entonces era una práctica común entre los compositores compartir parte de los royalties con los directores de banda que estaban dispuestos a grabar sus canciones. 

El afroamericano Maceo Pinkard (1897 – 1962) fue uno de los grandes compositores del Renacimiento de Harlem y el primero de su raza en fundar su propia editorial musical, «Maceo Pinkard Music», en 1917. Pinkard fue un caso atípico dentro de los compositores negros ya que trabajó exclusivamente con letristas blancos para que convirtieran en palabras las notas de sus canciones. Además, en una época en que las relaciones interraciales estaban prácticamente prohibidas.
Pinkard fue quien introdujo a Duke Ellington en el mundo de las editoriales de Nueva York presentándole a Irvings Mills, fundador de la Mills Publishing, y que se convertiría en su manager de 1929 a 1939.

La primera grabación de «Sweet Georgia Brown», el 19 de marzo de 1925, fue obra de Ben Bernie and His Hotel Roosevelt Orchestra. Los músicos de la banda fueron (probablemente): Ben Bernie, (ldr-vn); Oscar Levant, (p); Donald Bryan, Bill Mooret (tp); Frank Sarlo (tb); Len Kavash, Norman Ronemous (cl, as); Jack Pettis (cl, ts); Nick Gerlach (vn); Paul Nito (bj); Max Rosen (tu); Sam Fink, (d); J. Kenn Sisson (arr).
La versión de Bernie entró en las listas de los discos más vendidos en junio permaneciendo en ellas durante trece semanas, de las cuales alcanzó el número uno en cinco seguidas.

Ben Bernie (1891 – 1943) formó su primera banda a principios de la década de 1920, pero fue en los años treinta, y gracias a sus programas de radio de variedades (donde era conocido como «el viejo maestro»), cuando se hizo famoso a nivel nacional.

Kenneth Casey (1899 – 1965) es una artista poco conocida del mundo del show business aunque fue una actriz infantil de éxito en el cine mudo, letrista, publicista y escritora. Lo cierto es que solamente se la menciona como la letrista de «Sweet Georgia Brown».
La letra que escribió dice así;
Ninguna chica le hace sombra a Sweet Georgia Brown / tiene dos pies izquierdos, pero ¡oh! qué arreglados los lleva, Sweet Georgia Brown / todos suspiran y se dejarían matar por Sweet Georgia Brown / te diré por qué, sabes que no miento… demasiado / se ha dicho que entran en shock cuando aterriza en la ciudad / desde que vino, es una pena ver como los deja tirados /  los tipos que no puede conseguir son aquellos con los que no se ha topado / Georgia la reclamó, Georgia la nombró / Sweet Georgia Brown.

Existen varios cuentos de hadas sin ningún sentido que tratan de explicar por qué Kenneth Casey eligió el nombre de Georgia Brown como título de la canción. Ella, que se sepa, nunca lo comentó.

El musical titulado «Cabin in the sky» se estrenó en el Martin Beck Theatre el 25 de octubre de 1940 y se mantuvo en cartel durante 156 representaciones. La escritora de la obra, Lynn Root, se apropió del personaje de Georgia Brown de Kenneth Casey y la convirtió en una vampiresa enviada por Lucifer para tentar con sus encantos al protagonista del musical. El papel de la seductora mujer recayó en la bailarina y coreógrafa, Katherine Dunham. Tres años más tarde, el director Vincente Minnelli llevó a la pantalla grande a «Cabin in the sky» y el papel de Georgia Brown se lo dio a la cantante y actriz, Lena Horne. Curiosamente, en ambas obras no sonó la canción «Sweet Georgia Brown».

El 2 de marzo de 1976, se estrenó el musical «Bubbling Brown Sugar» en el Anta Playhouse de Broadway y alcanzó la bonita cifra de 766 representaciones. La obra está llena de grandes canciones de diferentes épocas y estilos. Entre ellas está «Sweet Georgia Brown» interpretada por la actriz, cantante y bailarina, Vivian Reed. «Bubbling Brown Sugar» estuvo nominado a tres premios Tony: Como mejor musical, mejor actriz (Vivian Reed) y mejor coreografía (Billy Wilson).

«Sweet Georgia Brown» no ha sido únicamente uno de los standards más escuchados desde que se escribió, allá por 1925, sino que también es uno de los más interpretados.
He elegido, en su versión vocal, la que grabó Ethel Waters el 13 de mayo de 1925 y no solamente por su buen hacer, sino porque además canta una «intro» que muy rara vez se escucha en los discos. Su letra dice así:
“Llegó ayer. Dicen que de repente todo está más “hot”. Hay un gran cambio en la ciudad. Las chicas están celosas, sin duda. Aun así, los chicos hablan maravillas de Sweet Georgia Brown. Y desde que llegó, la gente de color dice: ¡Dime!”

El grupo que acompañó en el estudio a Ethel en «Sweet Georgia Brown» le pusieron el nombre de “The Ebony Four”: Fletcher Henderson o Pearl Wright, piano; Don Redman, clarinete y saxo alto; Joe Smith, corneta; y un guitarrista no identificado.

Para la versión instrumental quién mejor que la orquesta de Count Basie: Lyn Biviano, Sonny Cohn, Pete Minger, Bobby Mitchell, trumpets; Curtis Fuller, Al Grey, Mel Wanzo, trombones; Bill Hughes, bass trombone; Danny Turner, alto sax; Bobby Plater, alto sax, flute; Jimmy Forrest, tenor sax; Eric Dixon, tenor sax, flute; Charlie Fowlkes, baritone sax; Count Basie, piano; Freddie Green, guitar; John Duke, bass; Butch Miles, drums; Allyn Ferguson, Sammy Nestico, arrangers.
«Sweet Georgia Brown» fue uno de los cortes del L.P. titulado «Primer Time» grabado en los Sun West Studios de Los Ángeles, CA, el 18, 19 & 20 de febrero de 1977, para Pablo Records, el último sello que fundó Norman Granz.

Sirviéndose de la novedosa parrilla armónica de «Sweet Georgia Brown», han sido varios los músicos de jazz que han compuesto un abanico de temas.  Por ejemplo, Miles Davis escribió el titulado «Dig» (1951) y Thelonious Monk, «Bright Mississippi» (1962).

Subscribe