Blue Note Records: Conexión Berlín

Alfred Lion
Coristas de «Chocolate Kiddies»
Sam Wooding Orchestra;: Tommy Ladnier, John Warren, Sam Wooding, Willie Lewis, George Howe, Herb Flemming, Eugene Sedric, Johnny Mitchell, Bobby Martin, Garvin Bushell, Maceo Elmer Edwards
Weintraub’s Syncopators; Stefan Weintraub; Heinz Barger; Addy Fisher; Emanuel Fisher; Horst Graff; John Kaiser; Cyril Schulvater; Leo Weiss – Berlín
Albert Lion & Francis Wolff
Commodore Music Shop
Norah Jones
Thad Jones
John Coltrane

Blue Note Records: Conexión Berlín

Alfred Lion nació en 1908 en el barrio de Schöneberg en Berlín. La familia de su padre, que era arquitecto, procedía de Polonia, al igual que su madre que se llamaba Margerite.
El lugar preferido por la bohemia de la ciudad para reunirse era la zona donde vivía la familia Lion y más concretamente el club Eldorado donde actuaba Marlene Dietrich.
Margerite fue un miembro activo de la comunidad artística berlinesa que había florecido durante la tolerante época de la República de Weimar.
La primera vez que Alfred Lion tuvo contacto con el jazz fue a raíz de la llegada a Berlín de la revista estadounidense “Chocolate Kiddies” el 18 de mayo de 1925. Una semana más tarde el teatro Admiralspalast subió el telón para que el público pudiera disfrutar del citado espectáculo que permaneció en cartel durante ocho semanas.
“Chocolate Kiddies” fue una revista musical producida al estilo de las de Broadway, pero que curiosamente nunca se representó en sus escenarios. En vez de estrenarse en uno de los teatros de la zona, los 500 profesionales contratados por empresario Arthur Seymour Lyons se embarcaron en el buque “SS Arabic” con destino a Hamburgo.
La música de “Chocalate Kiddies” estuvo a cargo del pianista, compositor y director de banda Sam Wooding, que a raíz de esta gira por varios países europeos se pasó una buena parte de su vida en el Viejo Continente.
El estreno de “Chocolate Kiddies” en Alemania se realizó en Hamburgo el 28 de julio en el Thalia Theater. Luego visitaron Berlín y partieron para Suecia donde finalizaron la gira el 25 de septiembre de 1925.

El periodista Net Hentoff le preguntó a Alfred Lion – cuando este ya estaba asentado en los EE.UU. y “Blue Note Records” llevaba tiempo funcionando – qué había sentido al escuchar por primera vez a la banda de Sam Wooding: “Recuerdo que me interesó al instante. Sentí la música. Y no supe en realidad qué me hizo sentirla. Sin embargo, la estancia de Wooding en Alemania llegó a su fin poco después de que Wilhelm Frick, un destacado dirigente nazi, promulgase la Ordenanza Contra la Cultura Negra, que se oponía específicamente al jazz”.
La actuación de Wooding en Alemania de 1931 fue la última de una orquesta compuesta por completo de músicos negros que se escuchó en el país durante casi dos décadas.

Alfred Lion con veinte años, en 1928, decidió viajar a Nueva York. El primer día que llegó durmió en un banco del Central Park, pero enseguida consiguió un trabajó en el muelle descargando camiones. Esta ocupación le proporcionó el suficiente dinero y libertad para poder visitar los mejores clubs de jazz de la ciudad, desde el Cotton Club al Café Society o desde el Connie’s Inn al Small Paradise. Vio en directo a las mejores bandas y a los más creativos improvisadores del panorama jazzístico, ya que la Gran Manzana era el centro neurálgico de todos ellos. Mientras Lion trabajaba en el puerto – sus biógrafos no aclaran el motivo – recibió una fuerte paliza que le mantuvo postrado en la cama de un hospital durante varias semanas. Cuando le dieron el alta volvió a Alemania, llevándose consigo un montón de discos bajo el brazo.
Una vez que se instaló en Berlin conoció a la banda alemana de jazz que en esos días estaba electrizando a las audiencias. Se les conocía como “Weintraub’s Syncopators” y estaba formada por ocho músicos liderados por el trompetista Stefan Weintraub. Aparte de sus grabaciones y de sus actuaciones en directo, participaron en varias de las primeras películas sonoras siendo la más importante “Der Blaue Engel» (El Angel Azul) protagonizada por Marlene Dietrich en 1930.
En 1935 el gobierno nazi prohibió que los judíos pudieran formar parte de cualquier formación musical lo que significó el fin de los “Weintraub’s Syncopators” en Alemania, ya que prácticamente todos ellos lo eran. Su primer destino fue Rusia donde permanecieron 18 meses. Le siguió Manchuria, Shanghai y Japón. Visitaron finalmente Australia donde llegaron hacía 1938 y permanecieron en este país hasta su disolución en 1942.

En el año 1933, y tal como se estaban poniendo la situación en Alemania, Alfred Lion junto con su madre Margerite emigraron a Santiago de Chile. Los tres años que duró la estancia de Alfred en el citado país fueron tiempos duros ya que no encontró un trabajo acorde con sus actitudes, por lo que decidió volver a Nueva York. Era el año 1936.

Aparte de Alfred Lion, varias personas jugaron un papel decisivo para que el sello “Blue Note Records” se convirtiera en una realidad.
En primer lugar, voy a nombrar a Francis Wolff, berlinés y amigo de la infancia de Lion. Ambos vivieron en el mismo barrio. Sus respectivas familias también fueron amigas y formaron parte de la comunidad bohemia e intelectual de Berlín, no es pues de extrañar que Francis, animado por su madre, se convirtiera en un excelente fotógrafo. En el año 1939 emigró a Nueva York y participó activamente en el nacimiento de la discográfica. En un principio se ocupó del aspecto fotográfico, pero según pasaban los años se fue involucrando cada vez más en la gestión de la empresa.
Otro de los co-fundadores de Blue Note fue el escritor, artista gráfico, fotógrafo y activista de izquierdas Max Margulis que se convirtió en el socio capitalista y a través suyo Lion se relacionó con el mundo intelectual y artístico de Nueva York.
Otro personaje importante en los primeros pasos del sello fue Milt Gabler. A mediados de los años treinta abrió una tienda a la que llamó “Commodore Music Shop”. Su finalidad era, una vez obtenidos los permisos necesarios, poder reeditar antiguos discos de jazz que en su día habían formado el catálogo de importantes discográficas. El establecimiento se convirtió en un verdadero imán tanto para los seguidores como para los intérpretes de jazz. En el año 1938 creó su propia discográfica “Commodore Records” famosa en la historia del jazz por ser la única que se atrevió a que Billie Holiday grabara el tema “Strange Fruit” (que trata del linchamiento de los negros). La fecha fue el 4 de abril de 1939.
Cuando Alfred Lion tuvo en su poder los primeros discos de “Blue Note Records” en 1939 no disponía de ninguna distribuidora y fue Milt Gabler quien le ofreció el espacio necesario en sus, ya por entonces, dos tiendas.

El 6 de enero de 1939, en un local que parece ser que en su día fue una emisora de radio de la WMGM en el West Side de Manhattan, Alfred Lion reservó un estudio para grabar cuatro temas. Dos de ellos interpretados por el pianista Meade “Lux” Lewis: “Melancholy” y “Solitude”. Los otros dos lo fueron por el pianista Albert Ammons: “Boogie Woogie Stomp” y “Boogie Woogie Blues”.
Alfred Lion se atrevió a fabricar 25 copias de cada uno y las sacó a la venta el 3 marzo de 1939, con la numeración BN1 y BN2. Al no tener ninguna distribuidora activa, los ofertó mediante venta por catálogo al precio de un dólar y medio. Como he comentado anteriormente el problema de la distribución se le terminó gracias a Milt Gabler y a sus tiendas.

El 7 de abril de 1939, Alfred Lion quiso jugar ya en la “Premier League” del jazz y contrató al trompetista Frankie Newton, al trombonista J.C. Higginbotham, al clarinetista y saxo soprano Sidney Bechet, al pianista Albert Ammons, al guitarrista Teddy Bunn, al contrabajista Johnny Williams y al baterista Sidney Catlett. Estos músicos, en diferentes formaciones y bajo el nombre de “Port of Harlem Jazzmen”, grabaron cuatro canciones que salieron en dos singles. Una de ellas fue “Summertime” de George Gershwin y con Sidney Bechet de solista. La grabación de este tema se convirtió en un momento crucial en la historia de “Blue Note Records”.
Bechet, el clarinetista y saxofonista soprano con el que Lion había tenido un breve encuentro en Alemania casi una década antes, realizó una de las mejores versiones del precioso tema de la ópera “Porgy and Bess”. El disco, lanzado al mercado con la referencia BN6, se convirtió en el primer gran éxito de ventas de la discográfica.

En ese 8 de junio de 1939 “Blue Note Records” dio el primer paso por esa alfombra roja por la que sigue caminando hasta el día de hoy, recibiendo felicitaciones y aplausos por parte de todos aquellos que forman el entramado del mundo del jazz y que saben reconocer un trabajo bien hecho.

63 años después de la efeméride que acabo de relatar “Blue Note Records” sacó a la venta un disco de la cantante, pianista y compositora Norah Jones.
Brian Bacchus (encargado de artistas y repertorio) del sello dijo: “Ningún álbum en la historia de Blue Note ha tenido tanto éxito ni ha vendido tantos discos: 25 millones al día de hoy. En 2003 obtuvo cuatro premios Grammy entre ellos el de Mejor Álbum del Año. Sin embargo, hay quien opina – y no sin razón – que este disco no es jazz de verdad; de hecho, un crítico musical afirmó que se trataba del álbum menos jazz de cuantos ha publicado el sello. Aunque puede que en aquel momento tuviera razón, no es algo que en realidad tenga importancia. El mismo crítico se quejaba de que la voz de Jones dominaba el disco, a lo que cabe preguntarse cuál es el problema. Se trata de una hermosa voz que atrapa desde ese ‘Don’t know why’… Lo cierto es que no es posible comprender por qué hay gente que no se puede limitar a apreciar el disco como lo que es, un álbum de gran belleza que está grabado e interpretado con destreza”.
En este parlamento subyace la pregunta sobre “qué es jazz y qué no lo es”. De lo que no hay duda es que la música que interpretaron Freddie Keppard, Buck Johnson, Jimmie Noone, King Oliver, Louis Armstrong, Kid Ory… allá en Nueva Orleans en los primeros latidos del siglo XX era Jazz, y lo era simplemente porque de esa manera la llamaron (y no precisamente en Nueva Orleans). A partir de ahí…
Alfred Lyon nos dejó en 1987 y no nos puede responder a la pregunta, pero a Wynton Marsalis le pidieron, en un programa televisivo, que explicara qué era el jazz. El respondió: ¿De cuánto tiempo dispongo?”

Es difícil elegir dos temas de la amplia discografía de “Blue Note Records”, pero me he decido por la canción titulada “Blue Room” composición de Richard Rodgers con letra de Lorenz Hart para el musical “The Girl Friend” de 1926. Los músicos que la van a interpretar, liderados por el trompetista Thad Jones son los siguientes: Tommy Flanagan, piano; Oscar Pettiford, contrabajo; Shadow Wilson, batería; Kenny Burrell, guitarra; Billy Mitchell, saxo tenor. El álbum se tituló “Detroit-New York Junction” y fue grabado el 13 de marzo de 1956.

El otro tema que os dejo se titula “I’m old fashioned” compuesto por Jerome Kern con letra de Johnny Mercer para la película de 1942 “You were never lovelier”. Nos lo va a interpretar John Coltrane al frente de los músicos: Kenny Drew, piano; Paul Chambers, contrabajo; Philly Joe Jones, batería; Lee Morgan, trompeta; Curtis Fuller, trombón. El álbum se llama “Blue Train” y se grabó en septiembre de 1957.

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