Saltando Por Las Teclas De Un «Boogie Woogie»
Los primitivos Juke Joints conocidos también como Jook Houses, Jooks o Jukes fueron pequeñas cantinas construidas con cuatro maderas a las afueras de los pueblos y donde los afroamericanos se reunían para escuchar música (normalmente con un piano), bailar, jugar y beber. Empezaron a proliferar después de la Guerra Civil, sobre todo en el Sur del país. A partir de los años cuarenta, y a raíz de salir al mercado las gramolas (jukebox), algunos de estos locales hicieron uso de ellas, en detrimento de la música en directo.
Los establecimientos conocidos como las barrel houses o los honky tonks son primos hermanos de los juke joints.
Coincidiendo con la entrada del siglo XX, varios pianistas comenzaron a desarrollar, en los juke joints de la zona este de Texas, una música basada en el blues, con un beat más rápido, rítmico y obsesivo, donde los dedos de la mano izquierda del músico tocaban figuras repetitivas pulsando las notas bajas (rolling) mientras que los de la derecha eran totalmente independientes, teniendo total libertad para interpretar riffs y figuras melódicas.
Esta polirritmia musical llegó, bordeando el Golfo de México, a Nueva Orleans y desde esta ciudad pasó a Chicago. Allá por donde se paseaba la denominaban de diferente manera: Fast Texas Piano, New Orleans Hop Scop, the Rocks, The Fives or the Sixteens…
George Washington Thomas aka Clay Custer (1883 – 1937) fue un cornetista, saxofonista y finalmente pianista. Según los estudiosos, este músico grabó por primera vez – en febrero de 1923 – esa música poli rítmica que surgió en los juke joints ubicados en Texas. El tema se titula The Rocks y lo compuso junto a su hermano Hersal (todo un niño prodigio del piano). George, hijo de un predicador baptista, se convirtió en el patriarca del clan del blues de Texas, figurando entre sus más insignes figuras, Hersal y su hermana Sippie Wallace que se convertiría en una de las más famosas cantantes blues.
Clarence “Pine Top” Smith nació en enero o junio de 1904 en un pequeño pueblo llamado Troy del estado de Alabama donde la mayoría de los afroamericanos trabajaban en el campo. Se cree que el apodo de “Pine Top” le viene desde muy joven por su afición a subirse a los árboles. Muy poco se conoce sobre su niñez y adolescencia, pero parece que su familia se trasladó a Birminghan (Alabama) y fue allí donde Clarence, con una edad de 16 años, comenzó a tocar a piano solo en los “juke joints”, “barrel houses”, “rent parties”, burdeles, teatros, campamentos de leñadores… siempre con la intención primordial de que el público presente bailara su música. Los músicos como él, que presentaban su show solamente con un instrumento, estaban siempre presionados ya que debían sacarlo adelante sin ningún tipo de ayuda. Clarence consiguió ser un poco diferente a los demás al “rapear” frases recurrentes de ánimo, humorísticas y salpicadas de sensualidad normalmente en argot afroamericano.
Clarence, con 20 años, se apuntó al T.O.B.A (Theater Owners Booking Association) que organizaba circuitos de vodevil por todo el Sur del país. Allí tocó el piano, cantó, bailó claqué y se convirtió en comediante. Los seis años que permaneció en la asociación le sirvieron para adquirir experiencia y su reputación como músico creció considerablemente.
En el año 1925, Clarence conoció a Charles Edward “Cow Cow”» Davenport, un veterano pianista con muchos kilómetros a sus espaldas y que también se ocupaba de descubrir nuevos talentos para la discográfica Vocalion. Cuando vio tocar a “Pine Top” le comentó: “Muchacho, te lo montas bien con el boogie woogie”. Hoy es el día en que los estudiosos siguen cuestionándose quién fue el primero que acuñó el término boogie woogie, si fue Clarence “Pine Top” Smith o Charles Edward “Cow Cow”» Davenport.
De lo que no cabe la menor duda es que “Pine Top” Smith se convirtió en el primer pianista que utilizó el término boogie woogie dentro del título de una canción: Pine Top’s Boogie Woogie. La grabó el 29 de diciembre de 1928 para el sello Vocalion y durante la canción les comenta a los presumibles oyentes cómo son los pasos que deben conocer para bailar correctamente el boogie woogie (que es un rock and roll interpretado 25 años antes de que Elvis Presley le diera el pistoletazo de salida)
Llegó el 1 de marzo de 1949 y el disco salió a la venta. A los dos meses se había convertido en el más vendido.
La noche del 14 de marzo “Pine Top” se dirigía a los estudios de “Vocalion” para realizar un ensayo de cara a la grabación que tenía prevista al día siguiente. Cuando salió se paró en el Masonic Adams Lodge Hall para escuchar música. En un momento dado se produjo un tiroteo en la sala y una bala perdida terminó con su vida. Solo pudo disfrutar catorce días del éxito de su boogie woogie.
A Clarence “Pine Top” Smith se le cita como uno de los más influyentes músicos de los años veinte y su tema “Pine Top’s Boogie Woogie” está considerado como uno de los más revolucionarios y transcendentes de su tiempo. El boogie woogie, como veremos, tuvo su época dorada durante los años treinta y cuarenta. Pero antes de centrarnos en ello, debemos preguntarnos ¿de dónde salió el término “boogie”?
El término “boogie” posee varios orígenes posibles. Uno de ellos nos traslada a África y a palabras como boog en lenguaje hausa, booga en mandigo o bogi proveniente del oeste africano y todas ellas con un significado de baile o del toque de tambores.
Otros nos sugieren que su procedencia se encuentra en la palabra bogyman, el hombre-espíritu en los rituales de vudú.
Por último, su etimología vendría del mundo del ferrocarril ya que se denomina bogie, según la RAE: “al conjunto de dos o tres pares de ruedas articulados en la plataforma de un vagón o locomotora para facilitar su adaptación a las curvas o al cambio de vías”.
Otra acepción de la palabra “boogie” se utilizaba para describir en argot la sífilis o como referencia a un burdel o al sexo. Un buen ejemplo de esto último lo vemos en la canción cuyo título es Down in Boogie Alley que lo podríamos traducir como Abajo en la Callejuela del Sexo. La interpretó la cantante de blues, Lucille Bogan, en el año 1934 y parte de la letra dice así: “Voy ahí abajo a la callejuela del sexo con la navaja en mi mano. El “blues” me agarrota. Voy a rescatar a mi hombre. Si tú vas a la callejuela del sexo llévate una pistola del 44. Las mujeres retienen allí abajo a tu hombre y no le dejan marcharse”.
Meade Lux Lewis y Albert Ammons fueron los pianistas más importantes del estilo boogie woogie, además de amigos desde la juventud.
Meade Lux Lewis nació en Chicago el 4 de septiembre de 1905. Tras una serie de trabajos temporeros, como limpiador de coches y recadista, encontró uno como taxista. Este empleo le sirvió para entrar en contacto con el espectro de población que acudía o atendía los “speakeasy” – locales donde se vendía alcohol de contrabando durante La Prohibición – y también con aquellos que buscaban o controlaban todo el negocio del sexo. Fue en uno de estos burdeles donde le contrató, Big Bill Boswell – uno de los capos más conocidos de la ciudad – para entretener al personal tocando el piano y ocuparse de la caja.
El nombre de Meade Lux Lewis empezó a sonar en esos ambientes dando como resultado que otro prostíbulo lo contrata exclusivamente como pianista, por lo que Meade aceptó este trabajo.
En esta segunda “sporting house”, Meade conoció a una mujer que tenía conexiones con la discográfica Paramount que le servirían finalmente para grabar su primer disco. En diciembre de 1927, Meade acudió al citado sello y dejó lista la canción Honky Tonk Train Blues. En octubre de 1929, grabó un segundo tema titulado Dearborn St. Breakdown. Ambos formaron un sencillo que salió a finales de 1929.
Es muy posible que el público melómano no estuviera preparado para el boogie woogie, ya que la venta del disco fue insignificante. A Meade Lux no le quedó más remedio que continuar compaginando la profesión de taxista con la de pianista para que los dineros le cuadraran.
En el año 1936, la discográfica Victor contrató a Meade Lux Lewis para grabar un sencillo. El 7 de mayo y en el Studio C que el sello poseía en Chicago, Meade interpretó nuevamente la canción Honky Tonk Train Blues que se convirtió en la cara A del disco
Con la salida del single al mercado las ventas se contabilizaron por miles y el éxito fue absoluto. Los aficionados ya estaban preparados para disfrutar de esa música marchosa y rápida llamada “boogi woogie” y Meade Lux pudo, por fin, licenciar al taxi y salir de gira por todo el país.
Por cierto, y según el autor, el título de Honky Tonk Train Blues le fue sugerido por un invitado cuando estaba interpretando el tema en una fiesta privada.
Albert Ammons nació en Chicago el 1 de marzo de 1907. Tanto su padre como su madre eran pianistas por lo que él, con 10 años, ya dominaba totalmente el instrumento. Con 17 consiguió un trabajo en la Chicago’s Silver Taxicab Company, la misma donde Meade Lux Lewis estaba contratado como taxista y a partir de entonces se convirtieron en grandes amigos.
Uno de los primeros trabajos que consiguió Ammons como pianista fue dentro de una pequeña banda que actuaba en los trenes que llevaban a los afroamericanos desde Chicago a sus ciudades de origen en el Sur en sus periodos vacacionales. A este convoy le llamaban honky tonk train y estaba equipado con un servicio de bebidas y pista de baile en un vagón de equipaje remodelado al efecto.
Albert Ammons ganó experiencia tocando con Françoise Moseley Louisiana Stompers en 1929 y con Louis Bank’s Chesterfield Orchestra de 1930 a 1934.
En el año 1934, creó su propia banda a la que llamó The Rhythm Kings: Israel Crosby, contrabajo; Jimmy Hoskins, batería; Ike Perkins, guitarra; Gay Kelly, trompeta; Dalbert Bright, saxo alto y clarinete. Esta formación permaneció durante casi dos años actuando en el Club DeLisa de Chicago posiblemente el más renombrado night club afroamericano de la ciudad.
En 1936, la discográfica Decca se interesó por la formación de Ammons y el 14 de enero de ese mismo año grabaron un single en el que la cara A fue una composición del pianista titulada Boogie Woogie Stomp, que rompió todas las expectativas de ventas al alcanzar la cifra de un millón de copias expedidas a las tiendas de discos.
A partir de esta canción Albert Ammons entró en el Olimpo de los pianistas del boogie woogie.
En el trascurso de 14 días, del 23 de diciembre de 1938 al 6 de enero de 1939 se sucedieron tres eventos que están recogidos profusamente en todos los tratados sobre el jazz o la música afroamericana en los que Meade Lux Lewis y Albert Hammons desempeñaron un importante papel. Estos acontecimientos los situaron en lo más alto de los músicos pertenecientes al estilo musical llamado boogie woogie, si es que no lo estaban ya anteriormente.
23 de diciembre de 1938
Joseph Barney fundó el club de jazz Café Society con estas ideas en mente:
“Quiero un club donde los blancos y los negros trabajen juntos bajo los focos en el escenario y se sienten juntos enfrente. Por lo que yo sé no existe un lugar así en toda Nueva York y pudiera ser que en todo el país”. El slogan del local era el siguiente: “Bienvenidos al “Café Society”, el Lugar Equivocado para la Gente Correcta”
El jueves 28 de diciembre de 1938, cuando el sol se perdía por el horizonte se abrieron por primera vez al público las puertas del “Café Society” y Barney vio convertido en realidad su viejo sueño. Los artistas que fueron invitados a actuar la noche del estreno fueron: El trompetista Frankie Newton y su banda. Las estrellas del boogie woogie: los pianistas Meade Lux Lewis, Albert Ammons y Pete Johnson. El pianista y cantante de blues Joe Turner y la cantante Billie Holiday con 23 años.
La sala estuvo abarrotada con más gente que las 210 personas permitidas. El humorista gráfico de New Yorker le comentó a Barney: “Había muchas celebridades allí, bien provenientes del teatro o de la política. En estos días siempre hay al menos media docena de senadores y congresistas de ideas afines. Yo ni siquiera recuerdo si los clientes bailaron”.
Si queréis profundizar sobre la historia del “Café Society” tenéis a vuestra disposición mi artículo: “Café Society: Algo más que un Club de Jazz”.
28 de diciembre de 1938
“Yo quería presentar un concierto en Nueva York ante la musicalmente sofisticada audiencia en el que se iba a escuchar junta por primera vez toda la Música Negra, desde sus rudimentarios principios hasta el jazz más actual. En el concierto intervendrían primitivos y sofisticados intérpretes. Yo quería incluir música gospel y también cantantes de blues… artistas cuya música jamás había escuchado la mayor parte de público neoyorquino”.
Esas frases las pronunció el productor y buscador de talentos, John Hammond. Cinco días después de que el “Café Society” abriera sus puertas, el Carnegie Hall, la sala de conciertos más prestigiosa de los EE.UU., acogía sobre sus escenarios un espectáculo musical bajo la denominación de From Spirituals to Swing. Los músicos que lo hicieron posible fueron los siguientes: la orquesta de Count Basie a la que se unió el cantante Jimmy Rushing y el trompetista Hot “Lips” Page. Los grupos de gospel Mitchell’s Christian Singers y The Golden Gate Quartet. El pianista y cantante de blues Joe Turner. El vocalista de folk Sonny Terry. El pianista de stride James P. Johnson. Los pianistas de boogie woogie, Pete Johnson, Meade Lux Lewis y Albert Ammons. Este último acompañó a la cantante y guitarrista de blues Sister Rosetta Tharpe y al bluesman Big Bill Broonzy.
El periódico del Partido Comunista Norteamericano The Masses, que financió el concierto casi en su totalidad, escribió: “La música que estuvo presente en “From Spiritual to Swing” se escucha raramente. Realmente América es más rica con ella, pero los autores serios la han desatendido y sus seguidores la han criticado. La música Negra Americana ha ido creciendo en una atmósfera difamatoria, opresiva, distorsionada y con un irreflexivo entusiasmo”.
Para conocer más sobre la figura de John Hammond tenéis a vuestra disposición mi artículo titulado: John Hammond: Productor, Cazatalentos y Activista
6 de enero de 1939
Alfred Lion, el dueño del recientemente creado sello discográfico Blue Note, estuvo presente en la inauguración del “Café Society” y en el concierto “From Spirituals to Swing y en ambos eventos escuchó tocar a Meade Lux Lewis y a Albert Hammons. Lion se puso en contacto con los pianistas con el propósito de que grabasen en su nueva discográfica. Los músicos solo tenían una única y sencilla pregunta: ¿nos vas a pagar? Sí, y además bien. El trato estaba hecho. No hay duda de que Lion estaba emocionado, adoraba el boogie woogie y el piano estilo blues de estos dos músicos.
Lion, para grabar a Lewis y Ammons, reservó un estudio para el día 6 de enero de 1939 en un lugar que se cree que fue unan emisora de radio de la WMGM en el West Side de Manhattan. Además de los pianistas y el ingeniero de sonido, parece probable pensar que Lion fue el único que estuvo presente. Tras llevar unas botellas de whisky para lubricar los dedos de los músicos, la labor de Lion en la sesión quedo limitada a ese detalle.
Lewis y Ammons realizaron diecinueve tomas aquella noche. Tras acabar la sesión y abonarles los honorarios, Lion se quedó sin dinero para pagar el tiempo de estudio. Al cabo de unas semanas, y tras abonar los honorarios, consiguió llevarse los masters. Mientras los escuchaba en su apartamento, tuvo la convicción de que aquella música debía llegar a más gente: “Decidí mandar hacer algunos ejemplares y meterme en el negocio de la música”.
Las diecinueve tomas se repartieron de la siguiente manera: Meade Lux Lewis realizó 8, Albert Ammons, 9 y tocaron el piano a cuatro manos en dos canciones. Una de ellas fue la titulada The Sheik of Araby escrita en 1921 por el compositor Ted Snyder con letra de Harry B. Smith y Francis Wheeler. Formó parte de la banda sonora de la película de Rodolfo Valentino titulada Sheik de 1921.
El 6 de enero de 1939 fue la primera sesión y grabación del sello Blue Note, que se convertiría con el paso de los años en todo un referente de la música y de los músicos de jazz, situándose a la altura de la discográfica Verve de Norman Granz
En cuanto al boogi boogie se refiere, los discos que sacó Alfred Lion lograron que este estilo de jazz perdurase con brillantez otros diez años hasta llegar a los cincuenta.
En los años cuarenta, Lewis y Ammons recibieron ofertas de Hollywood para trabajar en varias películas, desplazando su centro de operaciones a la costa Oeste. En numerosos dibujos animados de la época se pueden encontrar temas interpretados por ambos que nunca fueron reproducidos en disco.
El boogie woogie nunca ha podido recuperar el nivel de aceptación que se granjeó en los años cuarenta, pero de alguna manera él sigue estando presente en el rhythm and blues, es decir en el rock and roll, y también en algunas big bands que continúan en la senda que él marcó.
Larga vida al boogie woogie.
